Omar Fernández, vecino de Morse, contó como se atraviesa la cuarentena en el pueblo del distrito de Junín. <<A grande rasgos se va a pasando como en todos los pueblos y ciudades, por supuesto nosotros con más restricciones que las que por ejemplo pueden tener ustedes en la ciudad, nosotros tuvimos el gran problema del transporte, ahora se está liberando un poquito>>, indicó. Preguntado sobre los adultos mayores, dijo que <<en el caso de los jubilados (…) hay algunos que no están acostumbrados a cobrar con tarjeta, quieren ir a la caja de los bancos, era una gran problema cuando tenían que cobrar los jubilados (…) antes venía un banco móvil>>.
El acceso a los alimentos y los precios es un tema que preocupa en todo el distrito, tanto por el aumento como por la gente que está sin ingresos y reciben asistencia directa. sobre este tema, Fernández dijo que <<en Morse nunca hubo control de precios y se sabe (…) ante cualquier movimiento en Argentina hay especuladores (…). Días atrás hubo denuncias por las cuales se hicieron presentes inspectores, recorrieron negocios y tenían precios exorbitantes>>.
De todos modos, para el vecino <<el gran problema que tiene Morse es la salud, porque encontramos una salud deteriorada de los últimos 4 años, y justo cuando estaba empezando a mejorar un poco nos ataca esta pandemia una cosa que no podemos prever la magnitud>>. El reclamo por un médico en el pueblo es histórico: <<acá funciona la Sala de Primeros Auxilios, son 4 horas nada más (…), lo veníamos reclamando hace años>>.